La Comisión de Bolsa y Valores (SEC), el organismo de control del mercado de valores estadounidense, está ofreciendo una bonificación por despido de 50.000 dólares a algunos de sus empleados elegibles. La medida, parte del esfuerzo de la administración Trump por reducir el tamaño del gobierno federal, plantea preguntas sobre el futuro de la regulación de las criptomonedas en Estados Unidos. ¿Podrían estas salidas voluntarias significar un alivio de la presión sobre el sector de las criptomonedas, después de años de un enfoque a menudo percibido como restrictivo?
La SEC recorta personal: detalles de la oferta de salida
Según un memorando interno enviado por el director de operaciones de la SEC, Ken Johnson, los empleados elegibles tienen hasta el 21 de marzo para solicitar la indemnización por despido voluntario. Para ser elegibles, deben haber sido empleados de la agencia antes del 24 de enero y dejar voluntariamente sus puestos mediante renuncia, transferencia a otra agencia o jubilación antes del 4 de abril. A cambio, recibirán un bono de 50.000 dólares, pero aceptarán no volver a trabajar en la SEC durante al menos cinco años, o tendrán que devolver el bono en su totalidad.
La medida es parte del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), una iniciativa lanzada por la administración Trump y liderada por Elon Musk, destinada a reducir la fuerza laboral del gobierno federal. Según Reuters, más de 100.000 empleados federales ya han abandonado sus puestos mediante despidos y rescisiones de contratos. Por lo tanto, la SEC parece estar siguiendo a otras agencias gubernamentales en esta política de reducción de costos.
Consecuencias para la regulación de las criptomonedas: ¿un punto de inflexión en la perspectiva?
Si la SEC recorta su personal, podría afectar su supervisión y regulación del mercado de criptomonedas. Hemos visto a la SEC abandonar ciertas demandas. Con menos personal y un presupuesto potencialmente reducido, la agencia podría verse obligada a reordenar sus prioridades y centrarse en los casos más importantes. Esto podría resultar en una desaceleración de las investigaciones y acciones legales contra las empresas de criptomonedas, o en un enfoque más específico y menos sistemático.
Es más, es posible que esta reducción de personal coincida con un cambio de filosofía dentro de la SEC, impulsado por la administración Trump. Como ha señalado la comisionada Hester Peirce, la SEC podría adoptar un enfoque más pragmático y menos dogmático respecto de la regulación de las criptomonedas, evaluando el estado de seguridad de los diferentes activos digitales caso por caso. El tiempo dirá si esta indemnización marca el comienzo de una nueva era para la regulación de las criptomonedas en Estados Unidos.