Bitcoin ha sido la gran revelación del último año, y el número de operadores en las plataformas de intercambio ha aumentado espectacularmente. Pero para aprovechar al máximo la popularidad de BTC en el mercado, hay que evitar algunos errores.
A pesar de sus constantes fluctuaciones, el bitcoin sigue siendo uno de los activos más populares del mercado, arrasando con las numerosas altcoins -desde Ethereum a Monero- y plataformas de intercambio.
Aunque la moneda digital está ahora muy lejos de los precios que atrajeron a tantos inversores, sobre todo en abril, cuando el bitcoin batió el récord de más de 62.000 dólares, el interés de los operadores sigue siendo alto.
Pero para capitalizar el fuerte interés que sigue rodeando a la criptomoneda, es necesario tener una idea clara de cómo funcionan el BTC y su mercado: he aquí 5 errores a evitar para obtener beneficios de sus inversiones.
1. Almacenar bitcoin en una cartera no segura
Como sabes, los bitcoins se almacenan en carteras digitales. Existen dos tipos: los Hot Wallets, que siempre están conectados a la red, y los Cold Wallets, que funcionan sin conexión. Antes de empezar a operar, los inversores deben evaluar cuidadosamente qué monedero se adapta mejor a sus necesidades, prestando especial atención al grado de seguridad ofrecido.
En efecto, las carteras se ven a menudo afectadas por actividades de piratería, y la (escasa) protección de las carteras digitales sigue siendo uno de los principales factores de las pérdidas sufridas por los operadores. Así pues, los inversores que valoran la seguridad por encima del potencial operativo deberían centrarse en las carteras frías, que no están conectadas a la red y pueden ofrecer una sólida protección contra las incursiones de piratas informáticos.
2. No analizar Bitcoin
Otro error común de los operadores novatos es no realizar un análisis exhaustivo de la criptodivisa antes de operar. Este fallo expone a los inversores a altos riesgos de valoración, lo que puede provocar grandes pérdidas.
Por ello, es fundamental entender bien cómo funciona el activo, estudiar los movimientos pasados y, sobre todo, seguir atento a las noticias que puedan afectar a su evolución a lo largo de las semanas.
3. Dejarse influir por rumores y emociones
Para un trader es fundamental estar al tanto de las últimas novedades en criptodivisas, ya que la compra de BTC por parte de una gran empresa o la apertura de un gigante de los pagos online a las monedas virtuales podrían favorecer una subida de la cotización, del mismo modo que las declaraciones del consejo de un banco central sobre la necesidad de nuevas regulaciones podrían tener un efecto negativo sobre la cotización.
Sin embargo, es importante distinguir entre noticias y rumores: con demasiada frecuencia, los operadores se dejan influir por información o datos inexactos y acaban comprando o vendiendo en el momento equivocado. Del mismo modo, hay que controlar las emociones, ya que la irracionalidad de las personas a menudo se interpone en el camino de un análisis preciso y predictivo.
4. Vender bitcoin sin estrategia
Cuando el precio del bitcoin tiende a dispararse, los operadores se ven tentados a cambiar de manos y hacer efectivo su BTC. Un movimiento pacífico, sin duda, pero que debe ir acompañado de un análisis en profundidad de los costes, los beneficios y las pérdidas.
En definitiva, las estrategias son esenciales para entender la tendencia del bitcoin y, por tanto, para identificar el momento más adecuado para vender sus tenencias de bitcoin y maximizar los beneficios.
5. Esperar demasiado
Muchos operadores llevan apostando por el bitcoin desde la pasada primavera, cuando la criptodivisa comenzó a abrazar una tendencia alcista que -a pesar de la elevada volatilidad- acabó empujando al BTC por encima de la barrera de los 60.000 dólares.
Pero la subida del año pasado podría estar ahora engañando a los inversores sobre las perspectivas de ganancias, llevándoles a fijar objetivos demasiado ambiciosos. Para evitar decepciones, y por tanto desmotivaciones, también es importante conocer el lado oscuro de las criptodivisas, como las bruscas fluctuaciones de precios, como ha ocurrido en los últimos meses, y el (siempre presente) riesgo de burbuja especulativa, útil para trazar estrategias que no estén completamente alejadas de la realidad.