Producir un solo Bitcoin es cada vez más caro. Entre el aumento de la tasa de hash y el incremento de los precios de la electricidad, el coste medio de la minería se incrementó drásticamente en el segundo trimestre de 2025. Esta dinámica pone en duda la rentabilidad de muchos mineros y podría afectar al suministro a medio plazo.
Producción cada vez más intensiva en energía
- El continuo aumento de la tasa de hash global refleja una mayor competencia entre mineros, que requiere equipos más potentes y de mayor consumo energético.
- Esta tendencia viene acompañada de un aumento significativo del consumo energético, lo que encarece la extracción de cada Bitcoin (BTC).
Las facturas de energía están en aumento
- En varias regiones del mundo, los precios de la electricidad están subiendo, lo que aumenta la presión sobre los márgenes de los operadores mineros.
- Algunos pequeños mineros están comenzando a retirar o vender sus equipos, dando paso a empresas más grandes y mejor capitalizadas.
Oportunidades y amenazas
Oportunidades:
- Consolidación del sector: Las grandes empresas podrían fortalecer su posición frente a competidores menos rentables.
- Incentivos para la Innovación: Esta presión de costos podría acelerar la adopción de fuentes de energía renovables y tecnologías más eficientes.
Amenazas:
- Salida de los Pequeños Mineros: La disminución de la rentabilidad corre el riesgo de excluir a muchos actores, lo que reduce la descentralización de la red.
- Aumento del Precio Mínimo: El aumento de los costos de producción podría generar una presión alcista sobre el precio de Bitcoin a mediano plazo.
Conclusión
El aumento del costo de producción de Bitcoin marca una nueva etapa en la maduración del sector. Entre las tensiones energéticas y la evolución tecnológica, la industria minera está entrando en una fase de selección natural. Los actores más resilientes podrían emerger más fuertes, pero a costa de una red potencialmente menos descentralizada.