Los inversores no deberían dejarse engañar por las noticias negativas que dominan el mercado. Bitcoin, la criptomoneda líder, continuará su tendencia alcista a largo plazo durante esta década. El mercado de bitcoin y otras criptomonedas, como muchos mercados jóvenes, se caracteriza por fluctuaciones bruscas de precios. Esto también ha ocurrido en el pasado con las acciones que ahora dominan el mercado. Las acciones de Amazon fluctuaron de forma similar a las de bitcoin en términos porcentuales durante los primeros doce años tras su salida a bolsa en 1997. Posteriormente, experimentaron un movimiento alcista constante hasta la actualidad. En el caso de bitcoin, que se encuentra en su duodécimo año desde su creación, se ha consolidado como el entonces ridiculizado vendedor de libros. Bitcoin puede seguir siendo el "Amazon" de las criptomonedas.
Cada vez más inversores influyentes lo ven así. Por ejemplo, según una entrevista con Bloomberg, Carl Icahn planea invertir hasta 1.500 millones de dólares en diversas criptomonedas. En los mercados bursátiles, se pagan precios irrisorios por ciertas acciones, a las que denomina "acciones meme". Por lo tanto, las criptomonedas son una alternativa de inversión.
El modelo stock-to-flow es el que muchos analistas de criptomonedas utilizan como base para sus pronósticos de precios. Tras las recientes caídas de precios, su desarrollador, PlanB, no ve motivos para creer que la racha récord de bitcoin haya terminado. En cambio, se mantiene firme en su predicción de que bitcoin alcanzará un precio de 288.000 dólares en los próximos tres años. Sin embargo, este precio objetivo se basa en una versión ligeramente más optimista, el modelo stock-to-flow de activos cruzados (S2FX). Según el modelo original, la previsión de precio era de 100.000 dólares.
En Latinoamérica, podría estar gestándose un nuevo avance revolucionario. El parlamento de El Salvador aprobó una ley que convierte a bitcoin en moneda oficial del país, junto con el dólar estadounidense. Según el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, todos los restaurantes, peluquerías y bancos deberán aceptar bitcoin en el futuro. Bukele ve a bitcoin como una forma de que muchos ciudadanos escapen de la pobreza. Por ejemplo, el 70% de la población no tiene cuenta bancaria y Bitcoin podría beneficiar económicamente. El 30% del producto nacional bruto depende de las remesas de los exiliados salvadoreños, quienes deben pagar comisiones de cambio y transferencia muy elevadas.
La energía volcánica debería ser beneficiosa.
Otros países de la región, desde Paraguay hasta Argentina y Brasil, están observando este desarrollo y podrían abrirse a bitcoin. Este avance revolucionario en América Latina no complacerá a instituciones como la Reserva Federal o el FMI, pero no podrá detenerlos. Al contrario, la revolución de bitcoin se convertirá en un pilar fundamental para romper el dominio del dólar. El Salvador podría impulsar otra tendencia y convertir a bitcoin en una moneda ecológica: existen planes para utilizar la energía geotérmica de los volcanes para extraer bitcoins. Esto permitiría que las operaciones mineras se beneficiaran de energía 100% pura y renovable, con cero emisiones.