Los países del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) están considerando la posibilidad de lanzar su propia moneda común para reducir su dependencia del dólar estadounidense. Esta iniciativa forma parte de un movimiento más amplio para desafiar el dominio del billete verde en la escena internacional.
¿Qué es el CCG?
El CCG fue creado en junio de 1981 por seis países productores de petróleo: Arabia Saudí, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos, Qatar, Bahréin y Omán. Por primera vez desde su creación, el PIB de los países del CCG superó los 3 billones de dólares en mayo de 2023. Según el Banco Mundial, este PIB podría alcanzar los 13 billones de dólares en los próximos 20 años, lo que convertiría al CCG en un actor económico de primer orden.
Los planes del CCG para una moneda común
Según el ministro saudí de Economía y Planificación, Mohammed Al-Jasser, el CCG tiene previsto crear un banco central unificado y una moneda común. Esta nueva moneda podría estar vinculada a una cesta exclusiva de divisas, a los Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI o al dólar estadounidense inicialmente, para facilitar la transición. Este proyecto pretende reforzar la integración económica y financiera de los países miembros del CCG.
Las ventajas de una moneda común
Según Al-Jasser, esta moneda común eliminaría los costes de conversión de divisas en las transacciones intrarregionales y reduciría las perturbaciones causadas por las fluctuaciones de los tipos de cambio. Esto contribuiría a impulsar el comercio dentro del CCG. Además, esta moneda sustituiría al dólar estadounidense y reforzaría el sector financiero de la región. También ofrecería mayor estabilidad económica y política frente a influencias externas.